¿Los genios nacen o se hacen?
¿Algunas vez has oído que durante los primeros años de vida de los bebés sus cerebros son como esponjas? Según los expertos, el cerebro humano triplica su tamaño durante los dos primeros años de vida, y es en ese periodo de tiempo cuando se recomienda estimularlo al máximo para potenciar los límites de la inteligencia.
En los últimos años se han multiplicado las escuelas de genios. Se trata de academias de estimulación cerebral para bebés que están causando una auténtica revolución en Asia. Este es uno de los países más obsesionados con la preparación de los niños y su exquisita educación y por ello es el epicentro de este novedoso movimiento.
El Baby Jumper Gym es uno de estos peculiares lugares de entrenamiento de genios donde ejercitan la memoria fotográfica de los pequeños para actuar sobre cada una de las 100.000 millones de neuronas que contiene el cerebro de un niño al nacer, y que en sus dos primeros años irán estableciendo el patrón de sus conexiones y creciendo en tamaño.
El personal de estos centros trabajan además la estimulación visual de los pequeños. Según explican, agudiza las capacidades del hemisferio derecho del cerebro, como la intuición, la creatividad o el procesamiento de la información recibida. También ejercitan el izquierdo, en el que se entrena su incipiente uso de la razón para procesar y resolver situaciones.
Los especialistas en estimulación cerebral destacan la importancia de simplificar los conceptos y hacerlos lo más visuales posible. De ahí el uso de tarjetas didácticas o la práctica de cantar canciones cuya letra está impresa en cartulinas para que su memoria fotográfica la retenga. Sin duda, un novedoso método que puede convertir a un bebé en un auténtico prodigio, aunque estos resultados sólo se conocerán con el paso de los años.