La gracia de dos pequeños hermanos
No hay nada más grato en la vida que tener hermanos, para jugar o reñir un poco. Son sin duda la parte que le da gusto nuestra dulce infancia.
No hay nada más grato en la vida que tener hermanos, para jugar o reñir un poco. Son sin duda la parte que le da gusto nuestra dulce infancia.