¿Por qué es importante el deporte para los niños?

Con seguridad todos los padres hemos escuchado, una y otra vez, que los más pequeños de la casa deben hacer ejercicio con regularidad, que el deporte es realmente importante tanto para su desarrollo físico como social y emocional. 

Deporte para los niños - herramienta poderosa en el dasarrollo

La práctica de una actividad deportiva debe realizarse tanto en el entorno de las escuelas como fuera de ellas para que tenga un verdadero efecto sobre los niños, entre otros motivos porque ayudará a que el pequeño tenga más conciencia y dominio sobre su propio cuerpo. Así mismo, es una estupenda herramienta para fomentar la autoestima y la seguridad. Generalmente, a estas tempranas edades el deporte se practica en grupo, por lo que además servirá para que se integre y se relacione en un entorno social, sirviendo para una mejor aceptación en cuanto a errores y aciertos, frustraciones y triunfos. 

La toma de decisiones 

Uno de los principales motivos por los que es importante que practique deporte desde pequeño es la capacidad que irá adquiriendo para tomar decisiones, que le abrirán las puertas a una mayor autonomía. Este factor debe comenzar desde la elección del deporte a practicar hasta la elección de la vestimenta cuando vaya a una tienda de deportes a comprar su equipación y demás complementos para el buen desarrollo de la actividad física elegida. Será más consciente de lo que le gusta o disgusta y los padres podrán darle cierta libertad en este sentido. 

El trabajo en equipo y el cumplimiento de las normas 

Cuando hace deporte, como norma general en estas edades, entra a formar parte de un equipo con el que deberá desarrollar dotes comunicativas y empáticas. Así mismo, comenzará a trabajar con otras personas para un objetivo común, entendiendo que no tiene por qué ser el primero, ni el último, sino trabajar para el bien general, siguiendo unos pasos determinados y obedeciendo unas reglas y normas previamente establecidas. Aprenderá, al fin y al cabo, los cimientos de una convivencia social. 

La mejora física 

Es lógico suponer un mejor progreso en el desarrollo físico, como el fortalecimiento de los sistemas nervioso, respiratorio, circulatorio, digestivo e inmunológico, pero también produce una notable mejora en la percepción espacial, la coordinación, el equilibrio y la agilidad de forma general.  

El deporte en edades tempranas va a evitar o reducir las posibilidades de que aparezcan enfermedades como la obesidad y el sobrepeso. También es una excelente herramienta para fortalecer los huesos y la musculatura y, como consecuencia, el niño o la niña sentirá un aumento de la autoestima y de la confianza a las que se hacía referencia al iniciar este texto. 

Desarrolla la disciplina 

Por último, aunque se haya hecho una breve referencia a la obediencia de las normas, bien merece la pena incidir en este asunto, ya que crea hábitos saludables, como el autocontrol y la capacidad de enfrentarse a los entrenamientos, aunque resulten cansados o dolorosos. También, invita a ser disciplinados en la alimentación, cuidando la ingesta al consumir productos saludables. Elementos todos que fomentarán una conducta útil para el resto de su vida, facilitando el esfuerzo.