Terapia en frío para salvar la vida de un bebé
El pequeño Finley tenía una malformación en el corazón que le impedía desarrollarse normalmente. Su madre, al notar su bajo peso decidió consultar medicamente su caso en el Hospital Universitario de North Durham.
La solución inmediata fue una operación coronaria, que en un primer momento parecía dar los mejores resultados, pero tiempo más tarde se presentaron las primeras complicaciones; solo superables bajo el tratamiento de 'hibernación'.
El pequeño Finley fue sometido a bajas temperaturas durante 4 días. Desde los 32 grados, hasta llegar lentamente a los 37. Hoy en día su recuperación ha sido notable.