Los niños que hablan varios idiomas tienden a la tartamudez
El estudio fue publicado en la revista especializada Archives of Disease in Childhood, y tomó una muestra de 317 niños de Londres que habían sido tratados por un especialista en tartamudez entre los 8 y los 10 años de edad.
De ellos, un 22 % era bilingüe, o sea que hablaban un idioma además del inglés, como segunda lengua. De ellos, el porcentaje de tartamudos era más de la mitad, un 61 %, según el equipo dirigido por Peter Howell, del University College de Londres.
En la muestra total, uno de cada cinco niños tartamudos era bilingüe, y entre ellos los niños superaban a las niñas, en una proporción de cuatro a uno.
El estudio propone que si el niño se concentra en la segunda lengua hasta los cinco para luego aprender la lengua materna, en este caso el inglés, el riesgo de tartamudeo se reduce y la superación del problema se hace más fácil. Empezar el estudio de la lengua materna a una edad más tardía, afirman los investigadores, no afecta la educación en absoluto.