Los abrazos, terapia para los bebés prematuros
Los doctores comprobaron que los bebés sostenidos amorosamente por sus madres antes y durante el procedimiento se quejaban menos que los que estaban en la incubadora. La conclusión evidente es que el contacto con la piel de la madre favorece la tolerancia al dolor.
Los prematuros son los bebés que nacen antes de las 37 semanas de gestación. Deben pasar un tiempo en unidades de cuidados intensivos hasta que se desarrollen completamente sus órganos y puedan mantener la temperatura corporal.
El contacto con la madre, o con el padre, es en general muy positivo para el progreso del bebé prematuro, siempre y cuando salir de la incubadora no represente ningún peligro para su salud. Este método, que se conoce como método canguro y consiste en alternar la incubadora con el contacto piel con piel, está siendo implantado en hospitales de todo el mundo.
Los partos prematuros se deben a una serie de factores como:
El peso corporal. A mayor delgadez, existe más riesgo de tener un parto antes de los nueve meses.
La edad de la madre. Las madres menores de 19 o mayores de 35 tienen más probabilidades de alumbrar de forma prematura.
El haber tenido un parto reciente. Las mujeres que han tenido un hijo hace poco tiempo tienen mucho mayor riesgo de parto prematuro en su embarazo.
Los embarazos múltiples (gemelos, trillizos). Este tipo de embarazos así como las fecundaciones in vitro aumentan también la probabilidad de parto prematuro.
Trastornos de la madre. Problemas como los de tiroides, el asma, la diabetes, la hipertensión, la mala nutrición, el estrés o la depresión se relacionan con la prematuridad.
El hábito de fumar. El consumo de tabaco por parte de la mujer embarazada es muy perjudicial para el feto y constituye un factor de riesgo.
Las infecciones intrauterinas. Este problema causa también partos antes de nueve meses.
Afortunadamente, en la actualidad los bebés prematuros tienen grandes posibilidades de sobrevivir gracias a los avances médicos, aunque pueden sufrir diversas secuelas, algunas muy graves.
La prevención es muy importante. Una atención adecuada desde los primeros momentos del embarazo reduce el riesgo del parto prematuro.