Frutas y verduras: la base de una alimentación sana
El consumo de frutas y verduras en una de las asignaturas pendientes en la dieta infantil. Sin embargo, se trata de alimentos básicos para aportarles una alimentación sana. Este conjunto de alimentos son imprescindibles porque tienen pocas calorías, muchas vitaminas, minerales, fibra y otras sustancias vitales para el organismo.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja cinco porciones de fruta y verdura cada día. Recientes estudios científicos desarrollados por la Universidad de Londres han determinado que la fruta y verdura ayudan a conseguir un menor nivel de mortalidad. El consumo de verdura reduce el riesgo de hipertensión en el futuro y enfermedades cardiovasculares.
A menudo resulta muy complicado que los niños coman este tipo de alimentos. Por eso te damos una serie de consejos para llegar a nuestro objetivo: el aporte diario de frutas y verduras para lograr una alimentación sana.
- Haz que te imiten. Ellos siempre quieren parecerse a los mayores. En una casa donde la fruta forma parte de la dieta de los adultos, es mucho más sencillo incluirla en la de los peques.
- Haz que se diviertan mientras comen el postre. Puedes elaborar platos muy divertidos con la fruta de temporada. A ellos les encantará participar en su elaboración y luego disfrutarán comiéndola. La comida les debe entrar por los ojos. Es mucho más atractivo para el niño, y acrecentará sus ganas de comer.
- Camufla la fruta en otros postres. Un idea que te damos es incluir trozos de fruta en leche o yogur natural, incluso, las empresas de productos lácteos comercializan desde hace tiempo este tipo de combinaciones.
- Hacer zumos. En nuestro segundo consejo te recomendábamos que les hagas partícipes en la elaboración de los postres. Otra idea es que prepares un nutritivo zumo para el almuerzo o la merienda con su ayuda. También puede dar muy buen resultado. Con esta alternativa los beneficios son variados: por un lado, te da la posibilidad de mezclar zumos de diferentes frutas y probar los resultados más ricos y, por otro, los zumos sacian la sed en épocas calurosas y son la mejor alternativa a los refrescos.
- Crea un hábito. Debes intentar crear un hábito. Comer fruta no puede convertirse en una exigencia. Poco a poco asumirá tus roles y la aceptará de buen grado.