Cuando los abuelos interfieren en la crianza de los hijos

Aveces es necesario recordar a los abuelos que sus nietos no son sus hijos, hacerlo, aunque parezca duro, impedirá que ejerzan mayor autoridad que nosotros en su educación.

Es una situación complicada mantener los límites en la relación. Por un lado, son ellos quienes nos ayudan en el cuidado de los niños, y además de brindarnos ese apoyo incondicional, se convierten en sus grandes amigos.

Sin embargo, llega un momento en el que sus criterios de crianza se anteponen a los nuestros, y tenemos dos alternativas por tomar: dejar que sus opiniones prevalezcan solo para evitar los conflictos o hacer respetar nuestro punto de vista, a pesar de la incomodidad del momento.

Busquemos el equilibrio antes de entrar en una pelea. Si los abuelos son compresivos, desde luego que todo se arreglará con un simple acuerdo, el problema surgirá cuando ellos acepten de mala gana tu postura o hablen con tu pareja para que interceda y te haga entrar en razón. Sé muy cautelosa en este caso, es posible que el criterio de los abuelos tenga algo de lógica y necesites considerarlo por el bien de tu hijo;  un cambio de actitud demostrará que sabes escuchar y que te interesa el bienestar del pequeño, además estrecharás los lazos afectivos con tus padres o suegros al ceder, será un gran muestra de humildad.