Juguetes
Coches eléctricos para niños: ¿Cuáles son sus ventajas?
Los coches eléctricos en miniatura cada vez son más completos, prácticos y seguros. Por ello, son un juguete ideal para los más pequeños.
El mundo de los juguetes ha evolucionado a pasos agigantados a lo largo de los últimos años. Ahora, la tecnología se ha incorporado a muchos de los juguetes favoritos de nuestros hijos, dando lugar a nuevas formas de diversión infantil.
Los coches eléctricos son una buena muestra de cómo han evolucionado los juguetes en la actualidad. En Pekecars.com encontrarás todo tipo de coches eléctricos para los más pequeños de la casa, desde coches clásicos hasta jeeps, todoterrenos o vehículos de alta gama.
A día de hoy, este tipo de coches resultan muy completos, fáciles de utilizar y garantizan un juego seguro. Además, se pueden encontrar diversos modelos, por lo que son ideales para niños de todas las edades. Por un lado, existen modelos con mando, que pueden ser teledirigidos por un adulto. Esta opción se recomienda para niños más pequeños, de entre 1 y 3 años. A su vez, hay modelos sin mando que pueden conducir los peques por si solos. En este caso, es perfecto para niños de entre 4 y 8 años.
Estas son solo algunas de sus ventajas. A continuación, ¡analizamos todos los beneficios de los coches eléctricos para niños!
Coches eléctricos y todas sus ventajas en la infancia
Las primeras etapas del desarrollo son el momento ideal para introducir nuevos conceptos a los niños. Y es que, durante los primeros años de vida, el cerebro está más preparado para aprender y adquirir nuevos conocimientos. Por ello, existen algunos juguetes conocidos como potenciadores, que ayudan a los más pequeños a conseguir unos objetivos de desarrollo concreto en cada etapa del crecimiento. Además de introducir a los niños en el mundo de la conducción, los coches eléctricos les aportan las siguientes ventajas:
Favorecen el juego simbólico
Un juguete es una de las mejores formas de que los niños practiquen el juego simbólico. Es decir, las actividades que los adultos llevan a cabo en la vida cotidiana. Los coches eléctricos para niños son excelentes potenciadores del juego simbólico. Y es que, favorecen esa faceta creativa que cada niño lleva dentro y les ayudan a trasladarse a escenarios imaginarios.
Pero además del escenario propiamente dicho, cuando manejan un coche eléctrico, los niños interpretan también otros personajes. Por ejemplo, pueden convertirse en policías, peatones o empleados de una gasolinera y poner en práctica todas sus funciones. A su vez, el hecho de que un niño pueda conducir un coche que se mueve de verdad le permite replicar la actividad de conducción que realizan sus padres en el día a día.
Favorecen el proceso de socialización
Un coche eléctrico es un juguete que siempre apetece compartir. De hecho, cuando un niño va a un parque con uno de estos vehículos, lo normal es que se le acerquen más niños que desean jugar con él y compartir las mismas aventuras de juego.
Por ello, otra de las ventajas que aportan los coches eléctricos es que favorecen el proceso de socialización en etapas tempranas del desarrollo, ya que, compartiendo su juguete, aprenden a relacionarse con otros niños.
Desarrollan la inteligencia corporal cinestésica
Los niños que desde pequeños manejan un coche eléctrico mejoran la inteligencia corporal cinestésica. Es decir, aquella parte de la inteligencia que está directamente relacionada con el esfuerzo físico. Al manejar el volante, los pequeños están desarrollando la capacidad de coordinación y también están trabajando la orientación.
Son totalmente seguros
Una ventaja no menos importante de este tipo de juguetes eléctricos es que su uso es totalmente controlable por parte de los adultos, pues los padres pueden llegar a tomar el mando del volante en cualquier momento de la conducción si observan algún tipo de peligro.
Hay que tener en cuenta que existen diferentes rangos de potencia cuando se habla de coches eléctricos. Los de 6V están especialmente indicados para los niños más pequeños, desde un año hasta los tres o cuatro años. Mientras, los coches de 12V ofrecen un rango de edad más amplio, que va desde el primer año hasta los cinco o seis años.
Por todos estos motivos, los coches eléctricos para niños son un juguete ideal para que los niños jueguen, aprendan y se lo pasen bien solos, en compañía de sus padres y con otros niños.